La primera detención se llevó a cabo alrededor de las 19.30 de la tarde de este pasado lunes en la plaza de Zabalburu, donde un vigilante fue agredido por un cliente de un comercio de alimentación, que intentó salir sin abonar el género oculto entre sus ropas. Según explicó el empleado de seguridad, el presunto ladrón, tras haber entregado los productos, intentó marcharse del lugar y, al ser retenido, comenzó a propinarle golpes y patadas.

Tras lograr controlarlo, dio aviso a la Ertzaintza y una patrulla se personó en el establecimiento comercial y procedió a la detención del joven, de 21 años, por hurto y por un delito de lesiones. El arrestado, con diversos antecedentes policiales, pasará a disposición judicial en las próximas horas.

Por otro lado, sobre las 3.45 de la madrugada de este martes, un menor, de 16 años, ha intentado robar en las máquinas de autoservicio ubicadas en la entrada de la estación de tren de Abando, después de romper los cristales de la puerta de entrada. Tras ser observado por el personal de seguridad, fue retenido y entregado a una patrulla de la Ertzaintza.

Asimismo, a las 6.00 de la mañana, los vigilantes de seguridad de un centro comercial de Indautxu informaron a la Ertzaintza de que habían presenciado cómo un varón rompía la ventanilla de un vehículo estacionado en la vía pública y, después de sustraer algo del interior, huía del lugar.

Los agentes establecieron un dispositivo de búsqueda del presunto autor, que fue localizado poco después en el barrio de Deusto. Los agentes que procedieron a su detención le realizaron un registro corporal preventivo, en el que encontraron, en el interior de los bolsillos del pantalón, restos de pequeños fragmentos de cristales procedentes, presumiblemente, de la ventanilla del vehículo objeto de robo. El arrestado, de 43 años, pasará a disposición judicial este martes.