El lehendakari Iñigo Urkullu, el diputado foral de Bizkaia Unai Rementeria, y el alcalde de Bilbo Juan Mari Aburto han asistido juntoa a un buen número de cargos y representantes institucionales a la recepción de San Ignacio en el Palacio Foral situado en la Gran Vía de Bilbo.

El acto ha contado con la presencia de alrededor de 500 personas representativas del tejido político económico, social y cultural vasco, entre los que han estado los consejeros Josu Erkoreka, Arantxa Tapia, Pedro Azpiazu, Iñaki Arriola, Alfredo Retortillo, Jon Darpón y María Jesús San José.

También se ha acercado hasta el Palacio foral el delegado del Gobierno en la CAV, Javier de Andrés; la presidenta del Parlamento de Gasteiz, Bakartxo Tejeria; la presidenta de las Juntas de Bizkaia, Ana Otadui; el presidente del TSJPV, Juan Luis Ibarra; la fiscal superior de la CAV, Carmen Adán; el exlehendari José Antonio Ardanza y el ex diputado general, José Alberto Pradera.

En su intervención, Rementeria ha recordado la celebración este año del 80 aniversario del bombardeo de Gernika, motivo por el que se ha guardado un minuto de silencio en honor a las víctimas.

Rementeria ha celebrado que la recaudación de la Diputación ha aumentado en un 30% desde 2011 y ha asegurado que la mejor política social es el empleo. En este sentido, ha reconocido que trabajadores de empresas como CEL, Edesa, GE o La Naval tienen «un futuro incierto» y tras asegurar que la Diputación va a «arrimar el hombro» para «buscar soluciones», ha destacado que es el momento de subir los sueldos.

Ha defendido la necesidad de que los trabajadores recuperen «el poder adquisitivo perdido durante la crisis» económica y se mejore la calidad del empleo.