Junto al libro de Óscar de Marcos para explicar a los canteranos los momentos que se viven y sufren en el fútbol profesional, en Lezama deberán impartir un tutorial con Raúl García sobre eso que se suele llamar ‘el otro fútbol’. El Granada planteó desquiciar jugada a jugada a los rojiblancos con el peleón Soldado y Puertas de acompañante, pero al final acabaron siendo víctimas de sus propios errores.

Si intentas picar a Raúl García, acabarás perdiendo. Ese puede ser el titular de este partido marcado por las constantes interrupciones, protestas, piques y tarjetas. Hasta nueve jugadores fueron amonestados. Cinco del Athletic, entre ellos Raúl García, que se perderá el partido ante el Betis por acumulación de tarjetas.

Y el gladiador que salió victorioso de la batalla fue Raúl García, que se encontró un penalti doble para adelantar a su equipo y cuando se marchaba ovacionado por San Mamés, llegó el segundo tanto de Yuri.

Misma alineación, primer susto

Garitano repitió la misma alineación que en El Sadar con Sancet en la media punta, Williams en banda derecha y Raúl García en punta. Kodro, que había estado probando antes del partido fue el jugador descartado. Los dos equipos posaron con el árbitro contra la violencia machista y aplaudieron a Carmelo Cedrún en el homenaje previo.

Fue la única concesión de un Granada que vino a San Mamés con la intención de sacar del partido a los locales. Para empezar cambiaron las coordenadas habituales del Athletic, que tuvo que atacar hacia la portería del fondo norte en la primera mitad. En el primer balón que tocaron Soldado y Puertas, sacaron una falta que hizo perder la concentración a los rojiblancos. Unai Simón no acertó a bloquear el centro de Montoro, pero desde el suelo consiguió tocar lo suficiente para que Yangel no acertara a rematar y se le fuera el balón arriba.

Tremendo susto por un error que la afición respondió arropando al joven portero al igual que había hecho tras una acción en la que Córdoba perdió la pelota en ataque. El Athletic no se encontraba cómodo y los jugadores se enzarzaron en disputas absurdas con el árbitro y con los rivales. En ese primer tramo el Granada se acercó con varios disparos que no encontraron portería.

Demasiadas imprecisiones, pérdidas y nervios en el Athletic. El único que parecía algo entonado era Williams, que también fue homenajeado por batir el récord de partidos consecutivos, y se escapó de su par en varias ocasiones.

Superado el cuarto de hora, Oihan Sancet consiguió entrar en juego y comenzar a equilibrar la balanza. Una jugada por la izquierda entre Córdoba y Yuri terminó con un remate flojo de Raúl García. Después Williams se fabricó un remate tras un pase en velocidad de Sancet.

Cuando parecía que el Athletic espabilaba, de nuevo polémica. Manotazo de Yuri a Puertas, que el árbitro no pita y Soldado se mete en medio pidiendo al árbitro mirar el VAR Si le llega a dar un poco más arriba o el árbitro interpreta agresión, quizá hubiera cambiado el resultado final.  Y es que el plan del Granada era jugar a ser marrulleros, buscando a Yuri a Dani García o Raúl, mientras el Athletic trataba de mover el balón por abajo, conectar con Sancet o entrar por las bandas.

Sin embargo, de manera incomprensible Domingos Duarte cometía un absurdo penalti víctima de un calentamiento innecesario. Cuando el portero Rui Silva ya había agarrado la pelota, Raúl García le daba un pequeño empujoncito por detrás, el central portugués respondía lanzando al suelo al navarro y el árbitro pitaba penalti.

Por si esto fuera poco regalo, Raúl García fallaba en su primer intento, pero el árbitro obligó a repetir el lanzamiento al adelantarse el guardameta del Granada. Demasiadas concesiones para un Raúl García que salía victorioso de sus particulares batallas y adelantaba al Athletic antes del descanso.

La segunda mitad volvía a arrancar mal para el Athletic. Faltas, tarjetas, protestas, constantes interrupciones... El guión se repetía y el Granada comenzó a merodear la portería de Unai Simón a balón parado. Sancet era el que más se ofrecía, pero en algunas de las intervenciones se le vieron las costuras en las pugnas y fue sustituido.

El conjunto nazarí dio entrada a Carlos Fernández en punta y después a Vadillo. Disfrutaba de más posesión, pero no generaba ocasiones. Los minutos iban pasando. Garitano metió a Ibai y Raúl García enviaba al larguero un remate forzado.

El Granada esperaba encontrar su oportunidad y el Athletic sentenciar en alguna aproximación. Con Lekue en el campo, los rojiblancos tuvieron una fase de más control de la pelota, pero nadie quería arriesgar. Seguían los piques, Rui Silva con Ibai y Raúl García con Puertas.

A falta de diez minutos San José sustituía al 22 que había ejercido de capitán. Se marchaba ovacionado y en la siguiente jugada Yuri hacia el segundo tras una espectacular conducción y pase final de Unai López.