Los agentes procedieron ayer al arresto de los tres jóvenes por su implicación en la comisión de robos con violencia a otros chavales de edad similar. Tras la práctica de diligencias policiales, quedaron en libertad a la espera de ser citados por la Fiscalía de Menores. Otros cinco jóvenes, todos ellos menores de edad, han sido imputados por los mismos hechos.

Según ha explicado la Ertzaintza, los asaltos se producían en la vía pública con el empleo de porras y otros instrumentos de amenaza y el botín consistía en dinero, teléfonos móviles, prendas de vestir u otros objetos de valor. La Ertzaintza achaca a este grupo un total de 17 hechos delictivos.

Según la versión policial, a finales de noviembre, tuvieron conocimiento de varios robos con violencia o intimidación cometidos en el barrio bilbaino de Deusto. A raíz de esa información, incrementó la vigilancia y se inició una investigación. Los asaltos se sucedieron en otras áreas de la capital como Indautxu, Santutxu y Begoña.

La Jefa de Centro de la Comisaría de Bilbao, Patricia Martínez de Musitu, ha detallado que las primeras denuncias se producen entre el 20 y 21 de noviembre por robos en Deusto, y, ante la presencia policial en esta zona tras esas denuncias, los presuntos autores se trasladaron hacia Indautxu, Parque de Doña Casilda, Jesuitas y alrededores del centro Zubiarte.

Según ha detallado, el 5 de diciembre salieron informaciones en prensa relativas a este grupo, que nuevamente volvió a trasladar su zona de actuación, en este caso, hacia Santutxu y Begoña.

Martínez de Musitu ha señalado que es un grupo de entre seis y ocho menores, entre ellos, alguna chica, que actuaban entre las seis y las once de la tarde, en festivos o vísperas de festivos.

Según el testimonio de las víctimas, los autores actuaban siempre en grupo. Abordaban a la víctima, en general menor de edad, y con la intimidación de instrumentos prohibidos como porras extensibles o puños americanos se apoderaban de dinero teléfonos móviles, prendas de vestir u otros objetos de valor. En alguna ocasión se ayudaron también para intimidar de algún perro.

Este grupo tendría relación «personal o de amistad» con los dos menores, de 13 y 16 años, que atracaron el 23 de diciembre a Ibon Urrengoetxea en la capital vizcaina, y que le dieron una patada que le hizo caer y golpearse en la cabeza, lo que causó su fallecimiento, según ha explicado la Policía autonómica en una rueda de prensa ofrecida en la comisaría de Erandio, en Bizkaia.