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Ibon Areso, comerciantes del Casco Viejo y Jon K-Toño Frade J., premios Txikito de Honor

El exalcalde de Bilbo Ibon Areso, los comerciantes del Casco Viejo por su medio siglo de asociación y el fallecido Jon K-Toño Frade J. han sido galardonados con los premios ‘Txikito de Honor’ 2019 coincidiendo con la celebración el viernes del Txikiteroen Festa.

Begoña Pikaza, viuda de K-Toño Frade; Ibon Areso y Eider Txarroalde.
Begoña Pikaza, viuda de K-Toño Frade; Ibon Areso y Eider Txarroalde.

El colectivo Txikiteroen Artean, organizador de la Txikiteroen Festa, que este año celebra su 56º edición, distingue anualmente a personas y colectivos con este galardón con el fin de reconocer la labor y contribución de personas y colectivos en la promoción de Bilbao y del txikiteo como forma de relación humana e integración social.

Los premiados han recogido este mediodía el galardón –basado en el clásico vaso de txikito de los de culo– en un acto celebrado en el edificio La Bolsa, donde se encuentra el ‘Hito de los Txikiteros’, el monumento que recoge todos los premiados desde 1997 cuando se instituyó el galardón.

La entrega se enmarca dentro de la 56ª Txikiteroen Festa – Fiesta de los Txikiteros que se celebra esta semana y que culminará el viernes 11 de octubre, día de la Virgen de Begoña, con la ofrenda foral y de txakoli por la mañana, y el multitudinario canto de la Salve por la tarde.

En concreto, Txikitero Artean premia a Ibon Areso por su «papel en la transformación de Bilbao, como técnico y como alcalde, manteniendo la esencia de la tradición», también en lo que se refiere al txikiteo.

Por su parte, la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo recibe este galardón en su 50 aniversario como «elemento imprescindible en la conservación de la tradición del txikiteo en las calles del Casco Viejo y como agente impulsor, desde su nacimiento, del día de los txikiteros y de la fiesta de los txikiteros».

Por segunda vez

A su vez, Jon K-Toño Frade J, fallecido este año, recibe el premio especial de ‘txikitero universal’, por su figura como «cronista y dibujante de la villa, por su labor como artista en la representación de imágenes de Bilbao y por su labor participativa en la fiesta de los txikiteros».

Era también, de hecho, integrante del coro Indautxuko Lagunak Abesbatza, conjunto muy activo, con sus bilbainadas, en la fiesta de los txikiteros a lo largo de los últimos años. Su viuda, Begoña Pikaza, ha recogido el galardón.

Los premiados, en la entrega de premios, han emplazado a mantener vivo el espíritu de esta tradición y a que conviva con el Bilbao más moderno.