La incautación tuvo lugar el pasado 28 de marzo, según ha informado hoy, casi un mes después, la Delegación del Gobierno español en la CAV, en un control aleatorio de revisión del equipaje de los pasajeros que viajaban con destino a Shanghai.

Según la versión difundida, los agentes de la Guardia Civil seleccionaron varias maletas de dicho vuelo para inspeccionar su contenido y en el registro localizaron seis equipajes que contenían 36 bolsas de plástico llenas de agua y angulas.

Las bolsas con los alevines de anguila, muy apreciados en la gastronomía china, iban protegidas con mantas térmicas para su mejor conservación durante el largo vuelo a la capital económica del gigante asiático.

Los 40 kilos de angulas habrían alcanzado un precio en el mercado asiático superior a los 74.000 euros, estima la Delegación del Gobierno español en su comunicado.