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La lluvia de Bilbo embotellada y las invitaciones para el Guggenheim; entre las propuestas a Txirenada

La Orden Botxera de Farolín y Zarambolas concede un premio a las acciones en las que mejor se refleja el espíritu original de las txirenadas bilbainas, «pelín alocadas y extravagantes». Entre las candidatas a ganar la edición de 2017 destacan la comercialización y embotellamiento de la «lluvia de Bilbao» y los 300.000 euros gastados por la Diputación de Bizkaia con el dinero de los contribuyentes para invitar a los ciudadanos al Guggenheim.

Lluvia de Bilbao embotellada.
Lluvia de Bilbao embotellada.

La Orden Botxera de Farolín y Zarambolas destaca que en las «txirenadas» se conjuga «el afán emprendedor, siempre más allá (semper plus ultra), que constituye el incentivo de las faroladas, con el saber disfrutar del momento (carpe diem) propio de las zaramboladas, una dualidad en la que se ejemplifica la peculiar forma de ser de los bilbainos».

Entre las candidatas a ganar el premio de 2017 destacan «la ingeniosa genialidad de embotellar y comercializar la ‘Lluvia de Bilbao’»; «la chocarrería de la Diputación de Bizkaia de invitar a sus contribuyentes a visitar el museo Guggenheim pagando, los casi 300.000 euros de costo de las invitaciones, con el dinero recaudado de los propios contribuyentes». «Y la enorme expectación causada por el espectáculo de luces que la empresa británica "59 Productions" realizó durante cuatro días para finalizar los fastos del 20 Aniversario del Museo Guggenheim, con el que casi se colapsó medio Bilbao».