NAIZ

Pensionistas de Bizkaia denuncian «puntos débiles» en la atención a las personas mayores

El Movimiento de Pensionistas de Bizkaia ha publicado un informe sobre la situación de las personas mayores de 65 años en este herrialde y ha señalado algunos «puntos débiles» en la atención a estas personas en la situación actual generada por el coronavirus.

Foto de archivo de una movilización d elos pensionistas de Bizkaia. 8Monika DEL VALLE/FOKU).
Foto de archivo de una movilización d elos pensionistas de Bizkaia. 8Monika DEL VALLE/FOKU).

El Movimiento de Pensionistas de Bizkaia (MPB) ha publicado un informe sobre la situación de las personas mayores de 65 años. Según estos datos, hay actualmente 69.200 mayores dependientes en Bizkaia, de los cuales 10.100 (%14,5%) están ingresados en residencias y 14.000 (7,3%) son dependientes del Servicio de Ayuda Domiciliaria (7,3%). Además, 2.000 acuden a los centros de día.

En 2018, 23.129 tenían un grado de dependencia de nivel II o III, es decir, que son competencia de la Diputación y tienen derecho a residencia. Según han lamentado, la Diputación no aporta datos más actualizados.

Por otro lado, en mayo de 2018, había 17.500 PECEF (Prestación Económica para el Cuidado en el Entorno Familiar), y en los presupuestos de 2020 se prevé que se concedan 21.000. Para recibir la PECEF tiene que haber una persona familiar que resida con ella, que es nombrada cuidadora no profesional. Según denuncia el movimiento de pensionistas, «esto supone dejar el cuidado en manos de las mujeres, porque eso sucede en la mayoría de los casos». Además añaden que «muchas familias utilizan esa prestación para malpagar a una empleada de hogar, muchas veces migrante, para que realice el cuidado».

«Puntos débiles»

El Movimiento de Pensionistas de Bizkaia ha denunciado «puntos débiles» en la atención a las personas mayores en la situación actual surgida por la pandemia del coronavirus. Según señalan la suspensión de las visitas de las personas familiares o amistades, genera «aislamiento y sentimiento de indefensión» en las personas residentes. Además aseguran que sufren «desinformación con respecto al exterior de la residencia y del estado de familiares».

En relación a los recursos de protección sanitaria en las residencias, el MPB muestra su preocupación por la reducción del número del personal de atención especializada por bajas laborales; por la falta de recursos sanitarios para la atención especializada y material a las personas residentes; por la reducción del control sanitario en las residencias; por la reducción de los traslados a consultas medicas externas; por la no disponibilidad de medios de comunicación telemática...

También señalan que el cierre de los centros de día, donde asistían unas 2.000 personas, «supone un incremento de las cargas familiares por la atención de estas personas».

Con respecto al Servicio de Atención Domiciliaria, advierten del riesgo que produce la reducción del número de personas dedicadas a estas tareas y «el estado de precariedad» de las misma con respecto a los materiales de protección a utilizar y formación específica. Precariedad en las condiciones laborales que ya venían denunciando en el último año.

«Reforzar el sistema público de salud»

Por todo ello, el movimiento de pensionistas señala que se tiene que reconocer que «el hecho de la privatización y los recortes nos han traído a la precariedad, improvisación, falta de recursos materiales en todo el sector sanitario y de Servicios Sociales» y advierte que es necesario «no seguir por ese camino, sino reforzar el sistema público de Salud y de Servicios Sociales».

El MPB pide más medidas de protección para el personal sanitario, de cuidados, servicios auxiliares y personas residentes, y la dotación de materiales y equipos necesario para evitar el contagio. Así como la aplicación de protocolos específicos en cada sector.

Asimismo, piden un incremento de las inspecciones desde la Diputación sobre el cumplimiento de las medidas a adoptar en las residencias públicas y privadas; una ampliación de las plantillas de personal para cubrir las bajas y ampliar los ratios de personal/residentes; la activación en todas las instituciones de la junta de portavoces, o comisión permanente para el control de las actuaciones que demanden las necesidades sanitarias, de personal, de financiación....